EL DEBATE DE LOS CINECLUBS (II): PROGRAMACIÓN Y PÚBLICO

Segunda parte del debate digital sobre la situación actual de los cineclubs en Galicia y en el Norte de Portugal entre Iván Cuevas (Cineclub de Compostela), Paulo Cunha (Cineclub de Guimarães), Mely López (Cineclub Lumière de Vigo), Marcos Nine (Cineclub da Illa de Arousa), Ricardo Paz (Cineclub do Carballiño) y Manuel Precedo (Cineclub Padre feijoo de Ourense). Podéis leer la primera arte aquí.

3. La programación

ACP. Cual sería vuestro criterio de programación?

Manuel Precedo (Cineclub Padre Feijoo de Ourense)

Nosotros no tenemos un criterio único: unas veces viene por la oportunidad, y otras por la selección continuada, que intentamos agrupar por ciclos, para dar una pequeña visión de conjunto.

No siempre podemos escoger las películas que queremos por los condicionantes de a quien pertenezca la distribución. El objetivo, en todo caso, es el de que la película provoque algún tipo de debate, perturbación o reflexión interna en el espectador; aparte, claro, de su presumible calidad en base a lo que dijo la crítica, porque casi nunca puedes ver la película antes, si esta es reciente.

El trabajo interno, por lo tanto, implica leer mucho, anotar -clasificando- e intentar sacar una programación estable con cierta antelación. Hay momentos en los que es necesario escuchar la realidad en la que se vive, en los que hay que dar información que no es accesible con los medios habituales, y entonces la programación, ocasional, tiene un componente social básico.

Ricardo Paz (Cineclub de Carballiño)

Como bien dice Manuel, en muchas ocasiones no podemos ver antes lo que proyectamos, por lo que la elección es más bien intuitiva. Primero atentemos a un criterio de supuesta calidad (premios en festivales, crítica especializada, blogs que nos gustan, compañeros de otros lugares que nos hacen recomendaciones, directores a los que seguimos con fidelidad…). Otro criterio es hacer visible un tipo de cine que muchas veces no llega a las salas comerciales, por lo menos en nuestra provincia, entre el que se encuentra el cine gallego y también aquellas películas que, por su temática, no van a pasar por las salas. Y en tercer lugar, primamos el cine que se dirige al cerebro del espectador para proponerle una visión de la realidad diferente a la que se impone en el discurso dominante.

Mely López (Cineclub Lumière de Vigo)

Pues en nuestro caso es también algo parecido: al no poder echarle una ojeada a las películas que proyectamos (algo que afortunadamente está comenzando a cambiar con algunas distribuidoras, que ya dejan un enlace: a ver si hacemos fuerza y conseguimos que lo hagan todas!!), la elección es más bien intuitiva. También suponemos calidad a los premios de “ciertos” Festivales en los que confiamos, leemos crítica especializada, blogs que nos gustan, recomendaciones de gente que igual tuvo oportunidad de asistir a algún estreno, y así, contrastando información, intentamos acertar en lo posible con los títulos, y después, si también es posible con los precios, pues adelante! Todo eso, además, viene determinado por la idea de sacar a la luz trabajos que están sin estrenar y que no interesan a las salas de la ciudad por diferentes cuestiones…

Paulo Cunha (Cineclub de Guimarães)

Al margen de alguna proyección excepcional, nuestra programación regular –unas ocho películas por mes- se define desde la dirección en una lógica de consensos, siguiendo tres enfoques: las sesiones de los martes, organizadas en ciclos temáticos de seis sesiones a lo largo de tres meses, están dedicadas al cine clásico (y no solo de Hollywood, sino cualquier película con más de treinta años); las sesiones de los jueves están dedicadas al cine de autor, generalmente europeo (incluyendo el portugués), latinoamericano y asiático; y la sesiones de los domingos están dedicadas a títulos más populares, como las películas premiadas en los Golden Globes, o los European Film Awards o los Oscars, excluyendo los blockbusters.

Como nuestra sala tiene tecnología digital (proyector DCP, que permite hacer sesiones en 3D), nuestra oferta es muy amplia, permitiéndonos programar cualquier película que esté en el circuito comercial portugués. Puntualmente, también recurrimos a festivales de cine portugués, a la Cinemateca o a algunas embajadas para conseguir copias que están fuera del circuito comercial.

Nuestra estrategia, teniendo en cuenta que nuestra base asociativa es muy heterogénea y diversificada, para por escoger títulos que puedan agradar a todo tipo de socios, desde los cinéfilos más exigentes a los más populares. Las sesiones especiales realizadas en colaboración con diversas instituciones locales y nacionales también tienen su lugar en esta estrategia, como las fiestas del cine francés o italiano, o las sesiones temáticas en días internacionales o mundiales (por ejemplo, contra la discriminación racial), así como las sesiones en las escuelas primarias y secundarias hechas a petición de los propios colegios e institutos.

Otro hito importante de nuestra programación es el Cine en Noches de Verano, un ciclo de cine al aire libre gratuito que se realiza desde 1989 en el centro histórico de la ciudad de Guimarães. Suele tener unas diez sesiones que reúnen entre todas alrededor de unas 5000 personas. Este ciclo vincula al cineclub con la comunidad y ayuda a conquistar nuevos públicos.

Iván Cuevas (Cineclub de Compostela)

Como ya dije antes, uno de nuestros criterios es el de buscar una cierta radicalidad, en la forma y en el contenido. A partir de esta idea, las razones para programar una u otra película pueden ser diversas. Las propuestas se realizan en asambleas y las discutimos entre todas. Como los intereses de las integrantes del cineclub son cada vez más variados, la programación de estos últimos años ha cogido un carácter más ecléctico, frente a otras temporadas que pudieron ser más uniformes.

Algo que intentamos, aunque no es un requisito inamovible, es fiar de algún modo la programación del mes, bien sea articulando un ciclo o buscando una idea que nos parezca que puede llevar de un filme a otro. También aceptamos o buscamos propuestas externas, e intentamos traer invitadas cada cierto tiempo que le den un valor añadido a la programación.

A diferencia de lo que estáis comentando desde otros cineclubs, nosotros, menos en contadas excepciones, nunca programamos nada que no hubiésemos visto antes, algo que supongo que está facilitado por el hecho de que no dependemos tanto de los estrenos, que ya cubren en buena parte otros proyectos de la ciudad.

Marcos Nine (Cineclub de Illa de Arousa)

Nosotros comenzamos a darle forma a la idea del cineclub en 2013 y la primera intención, o tentación, es la de tener una línea artística definida y más o menos heterogénea, pero al final optas por adaptarte a las circunstancias (que creo que es lo más apropiado).

Nuestro contexto es que estamos en una isla que cerró sus cines a finales de los ochenta, principios de los noventa, con lo cual vamos a cumplir casi treinta años sin un cine propio. La gente que quería ir al cine tenía que desplazarse un mínimo de 15 km. Por lo tanto, no es que dejase de ver cine, pero si que perdió el hábito de acudir a una sala y, en cierto sentido, perdió igualmente la curiosidad. Por tanto, nuestro papel es intentar cambiar esta dinámica.

Teniendo en cuenta esto, nosotros intentamos programar un cine diverso, por una parte películas que sean muy agradecidas de ver, y por otra películas que puedan ser más complejas. A mayores de este apunte genérico hay varias cuestiones que tenemos en cuenta:

1. Programación temática vinculada a una celebración concreta. Cada vez que celebramos una fecha concreta (desde el día del trabajador al día mundial del Alzheimer o el día contra la violencia de género, etc) intentamos celebrarlos con la proyección de una película que aborde el tema. Estas proyecciones suelen hacerse fuera de los días de nuestra programación habitual, a menos que las fechas coincidan. La gente siempre participa en estas celebraciones, y gracias a ellas conseguimos que se vea el cine como un elemento “útil” para transmitir conocimientos e ideas, sobre los objetos de la celebración.
2. El cineclub infantil. Es nuestra gran apuesta. Pretendíamos ponerlo en marcha este año, pero lo más probable es que arranquemos plenamente el año que viene. Consiste en crear una programación exclusiva para el público infantil. No es fácil porque muchas de las películas (especialmente para los más pequeños) no se estrenan en España y no tienen versión doblada (hablamos de un público que en muchos casos, aún no sabe leer), pero aún así aspiramos a poder armar una programación que podamos consolidar en el tiempo.
3. La programación local. No hablamos exclusivamente de la producción gallega sino en muchos casos de películas amateurs realizadas por gente de la zona. Para nosotros es importante dar cabida a películas que hacen colectivos de la zona, grupos de teatro, etc, porque es una forma de que la gente participe de los espacios públicos y de fomentar iniciativas particulares. Igualmente, para nosotros es muy importante contar con invitados que acompañen las películas; directores, productores, actores… Los encuentros posteriores a las proyecciones nos permiten que la gente no solo vea la película, sino que conozca a “personas”, y a partir de ahí ayudamos a crear públicos que sigan la trayectoria de determinados autores. En este sentido, tenemos muy buena experiencia: a partir de las proyecciones en el cineclub tenemos espectadores que se pusieron a curiosear la obra de nuestros invitados.
4. Programación general. Nosotros no tenemos la “obligación” de estar pegados a la actualidad, por aquello de que llevamos muchos años carentes de cine. Por esta razón, pensamos en una programación bastante ecléctica, que nos permita pasar por distintos géneros, proyectando tanto películas clásicas como actuales. Si que pensamos mucho en el público que tenemos, que en nuestro caso son mujeres de unos cuarenta años de media. No es que programemos exclusivamente para ellas, pero si que las tenemos muy en cuenta, porque son nuestra “base social”.

Presentación do filme ‘Entreparadas’ (Toño Chouza, 2013) no Cineclube Padre Feijoo de Ourense

4. El Público

ACP: Cual sería el perfil habitual de vuestros espectadores?

Manuel Precedo: Varían en edad, pero nuestro público es mayoritariamente senior. Depende mucho de la programación. Tal vez venga dado, porque ese público –bastante fiel, por cierto- fue despreciado por las parrillas comerciales. Trabajamos, en principio, con la idea de atraer a todo tipo de público, introduciendo también algunas sesiones para los más pequeños. Por eso, como decía Marcos Nine, hay pocas películas disponibles… aunque nosotros optamos por hacer dos pases: uno doblado y otro subtitulado.

Diría que nuestra masa social es en un 80% mayor de cuarenta años, y el resto está entre los treinta y los cuarenta años. El público más adolescente (entre quince y veinticinco años) es lamentablemente mínimo, y no tengo muy clara una razón contundente de esta falta.

Iván Cuevas: Nosotros intentamos dirigirnos a cualquier tipo de personas, y no sé si existe algo así como un perfil tipo, ni entre las espectadoras ni entre las socias. Es cierto que, durante algún tiempo, la edad media del público parecía crecer con la de las organizadoras, situándose en la treintena. Pero trabajar en una ciudad universitaria siempre hace que venga público nuevo a comienzos de temporada, y en los últimos años conseguimos fidelizar una cierta renovación, tanto entre las socias como en la junta directiva. Y, por supuesto, tenemos también espectadoras que superan con mucho esa edad.

Mely López: Nosotros también intentamos dirigirnos a cualquier tipo de público, y tratamos de organizar la programación con intereses diversos: feminismo, medio ambiente, nuevas realizaciones, literatura, manga, LGTB, periferias sociales, etcétera, pero el tipo de público que asiste no varía mucho. No sé si existe un perfil tipo, pero yo diría que, en general, ronda la cuarentena, son docentes y profesionales liberales. Hay público más mayor, pero poco más joven. Tampoco sé la razón, aunque me inclino a pensar (dadas las cifras de las redes sociales donde si hay público muy por debajo de los cuarenta) que es gente que ve el cine en casa…

Ricardo Paz: Esa dinámica y ese perfil vienen a ser los mismos en Carballiño. Nosotros pensamos en sesiones, excepto las infantiles, dirigidas a cualquier tipo de público, si bien es cierto que nuestros espectadores son sobre todo gente mayor: la media de edad creo que está por encima claramente de los cuarenta años.

Paulo Cunha: Por lo general, podemos hablar de tres tipos de socios / espectadores en el Cineclub de Guimarães:

1. Los más antiguos, que son socios desde hace más de treinta años, son personas con un fuerte espíritu asociativo, que encaran su condición de socio en una lógica de pertenencia a una comunidad. Generalmente, son socios que frecuentan muy poco las sesiones, pero que insisten en mantener el vínculo.
2. Los más recientes, los que son socios desde hace menos de dos años, son muchos de ellos estudiantes que viven en Guimarães y luego vuelven a sus tierras, por lo que son socios en una conjetura temporal. A veces, funcionan mucho en una lógica de pagador / usuario, frecuentando solo las sesiones y no conociendo mucho sobre la propia historia y la diversidad de programación del cineclub.
3. Los intermedios, que constituyen la gran mayoría de los socios, son personas con una filiación media de diez / veinte años, con una fuerte conexión emocional al cineclub, que reconocen y valoran su intervención social, cultural y cívica en la sociedad, y que participan en sus diversas actividades extra-cinematográficas.

Marcos Nine: Nuestra radiografía del estado del público es bastante similar a lo que exponen otros compañeros. En nuestro caso, excepto en el apartado de programación para niños, no nos dirigimos a ningún público en concreto, cosa que no quita que no tengamos conciencia del público real que tenemos: la mayoría, como dije antes, tiene unos cuarenta años de media y son sobre todo mujeres.

Tenemos serios problemas para que la gente joven venga al cine, y no creo que sea una cuestión de títulos, sino de los propios hábitos “de consumo”. Lo que quizás sea más “alarmante” es la falta de curiosidad que muestra el público de determinadas edades. En cierto sentido, solo muestra interés por ver lo que ya conoce y no por descubrir cosas nuevas. En ese sentido, el público adulto que supera los cuarenta o los niños son mucho más agradecidos porque mantienen la curiosidad. Después puede gustarle o no lo que ven, pero inicialmente tienen la actitud de querer ver y querer curiosear.

ACP: Tenéis algún mecanismo para que el público pueda intervenir de algún modo en la elección de la programación? 

Paulo Cunha: Formalmente no, pero la formalidad de las sesiones y de las relaciones personales entre los socios y la dirección promueven, con frecuencia, conversaciones sobre la programación, sobre ciclos de cine clásico o sobre sugerencias de películas. Por ejemplo, en este momento tenemos un ciclo llamado “Nuestros Cinéfilos” en el que la dirección ha invitado a algunos de los socios más regulares a escoger y presentar una película. Las redes sociales también permiten un diálogo más frecuente con asociados más ausentes o más tímidos. En general, la dirección intenta ir al encuentro de estas peticiones, siempre que tengan sentido en las líneas de programación definidas. Otra iniciativa, una publicación digital llamada Enquadramento dedicada a los cineastas más invisibles en la historia del cine, ha sido una buena oportunidad para invitar a algunos socios a escribir y a presentar sesiones sobre sus autores de referencia. Una de las condiciones de esta publicación es que sus autores deben ser socios del Cineclub de Guimarães.

Iván Cuevas: Nosotros invitamos a las socias y al resto del público a las reuniones para decidir la programación, especialmente a comienzos de temporada. De estas invitaciones han surgido algunas propuestas y sugerencias, pero en la práctica se han demostrado como insuficientes: son muy pocas las personas que acuden y en la mayor parte de los casos no se atreven a proponer ideas. Naturalmente, a nivel informal si hay comentarios sobre la programación, y hemos invitado a espectadoras para programar una determinada sesión o ciclo, pero consideramos que lo ideal sería establecer algún tipo de canal que asegurara el feedback sobre la programación, y al mismo tiempo, la propia renovación del Cineclub.

Continúa en una tercera y última parte…