ENTRECAMPOS, de João Rosas

Mariana es una muchacha de 11 años que acaba de mudarse con el padre para Lisboa, venida de una pequeña ciudad del Tajo. Los primeros días en la ciudad, a finales de agosto, los pasan acostumbrándose a la casa y conociendo el nuevo barrio, Entrecampos. Al final del primer día de clase, Mariana se pierde al volver a casa de la escuela y tiene que telefonear al padre para pedirle ayuda. Al día siguiente, traba amistad con un muchacho de su clase, Nicolau, y su hermano más viejo, Simão. Los dos hermanos invitan a Mariana a comer y la ayudan a llegar a casa, diseñándole un mapa.

He ahí la propuesta narrativa del cortometraje que João Rosas (N. 1981) presentó en la última edición del Curtas Vila do Conde, firmando también el argumento y el montaje (con Telmo Churro). Formado en Ciencias de la Comunicación, Rosas comenzó su carrera escribiendo libros de cuentos y colaborando con órganos de información, prosiguiendo los estudios en cine (en Bolonia, Londres y en el programa Creatividad y Creación Artística de la Fundación Calouste Gulbenkian) y realizando algunos cortometrajes.

Me parece importante comenzar por conocer detalladamente el argumento y el recorrido del realizador porque João Rosas es sobre todo un escritor y esta película nos recuerda eso a cada instante. La película es pavorosamente descriptiva, insistiendo (abusando) en los diálogos y en apuntes off-topic (como sucede con la niña de los excesos, por ejemplo) para ayudar en la caracterización psicológica de los personajes y en la verosimilitud de los mismas y de la propia historia, en una estrategia más literaria que cinematográfica. Estructuralmente, no sé si a propósito, João Rosas intenta contrariar el modelo de los tres actos, pero me parece que el efecto no resulta muy bien en este caso: el momento más dramático (cuando Mariana se pierde y tiene que pedir ayuda) de la historia sucede muy pronto y el momento final se prolonga demasiado (paseo con Nicolau y Simão).

A pesar del registro acentuadamente ficcional, João Rosas aclaró que esta película sigue un poco la idea de su película anterior, rodada en Londres. Birth of a City (2009), estrenado en el IndieLisboa 2010, es un documental ficcionado de 75 minutos construido en forma de diario. Al vivir en Londres, el joven realizador lisboeta aborda en esa película su relación con esa ciudad a la vez que documenta el trabajo de una joven pintora francesa (Claire Fahys) que también es una extranjera que vive en la capital inglesa.

En Entrecampos, así como en la película londinense, João Rosas busca hablar de su relación subjectiva con las ciudades donde vivió, abordando la arquitectura y el espacio urbano pero también las relaciones humanas y de sociabilidades cotidianas. La historia está inspirada en un episodio real que le sucedió a un amigo del realizador, pero no por eso deja de ser una visión personal y enamorada de una geografía muy particular.

Durante el pase en la sala principal del Teatro Municipal de Vila do Conde, no pude dejar de acordarme recurrentemente de un gran clásico del cine moderno portugués que también fue rodado en ese barrio lisboeta. Me refiero a Os Verdes Anos (1963), obra de estreno fulgurante de un entonces joven desconocido portuense llamado Paulo Rocha (N. 1935). Como la adolescente Mariana de Entrecampos, Júlio (Rui Gomes) es un joven adulto que llega a Lisboa viniendo de una pequeña localidad del interior y que siente diversas dificultades de adaptación e integración a la vida urbana. Quien la intenta ayudar Júlio son su tío Afonso (Paulo Renato) y la novia Ilda (Isabel Ruth), que hacen un esfuerzo para ayudar. Al contrario que Mariana, el drama de Júlio fue mucho más trágico.

Consulta este artículo en su versión original en portugués

Comments are closed.